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martes, 31 de enero de 2023

UNA HISTORIA DE ELVILLAR. CAPÍTULO 2 LA VEREDA.

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UNA HISTORIA DE ELVILLAR

Aventuras y desventuras de un "Villarejo" de la familia García de Santiago.

Autor: Daniel Olano Pérez


A Daniel por su creación y amistad.

Estos hechos comienzan a finales del S. XII y terminan a mediados del S. XIII, en plena Edad Media, y narran la vida de un VILLAREJO nacido en el seno de una familia y en una época, quizás, equivocada.



CAPÍTULO 2

LA VEREDA

La actividad en el pueblo de Elvillar estaba en pleno apogeo para ir preparando la siega y posterior recogida de la mies.


Los labriegos del pueblo se encontraban limpiando los accesos próximos a la aldea que tras los rigores del invierno y las fuertes tormentas que se produjeron al comienzo del verano, muchas de ellas de granizo, aparte de diezmar las cosechas habían provocado grandes daños en los caminos así como algunos fuegos que se llevaron por delante varias casas y cobertizos para guardar el ganado.


Todo esto llevó a los lugareños a reunirse para deliberar sobre la conveniencia de arrimar el hombro, con el fin de paliar los daños sufridos y desbrozar los caminos que habían quedado intransitables, convocando una vereda, siendo ésta aprobada por unanimidad.

D. Pedro, más conocido por "Pedruzo el Gordo" por su enorme barriga, el cual había sido designado por el Regidor de Laguardia, hacía las veces de "Alcaide" del castillo del pueblo, y como era uno de los pocos que sabían leer y escribir, había redactado una nota al finalizar la reunión con el acuerdo tomado... 




5 comentarios:

María José García Molina dijo...

Agradezco a Santiago estas píldoras de cultura que nos ayudan a conocer a otros autores que solo por casualidad podríamos haber descubierto

Anónimo dijo...

Que bueno el pregonero bravo 👏 y bravo Santi

Santi el montador dijo...

María José, muchas gracias por tus palabras, fíjate que Daniel es un señor Reserva, que aprovecha el tiempo en escribir a su manera, no es ni fue su profesión pero escribe con todo su corazón y eso se nota, para mí estos son tesoros, además esta semana están Daniel, que es el padre con su relato y su hijo Ernesto con la novela Llueve en las farolas, es todo un placer ver que están unido en la creación. Gracias María José y muchos tréboles en tu bonito proyecto.

Santi el montador dijo...

Gracias anónimo, ya sabes díselo al alcalde y me puedo ganar unos duros

Anónimo dijo...

¡Cómo mola ese pregonero! Vamos a por el siguiente capítulo.